La Historia tiene memoria selectiva, exactamente la misma que las personas que la escriben y la leen. Lo que ahora parece importantísimo puede resultar un hecho de nula relevancia histórica. El tiempo es maestro en separar el trigo de la paja y dar a cada uno el lugar que le corresponde.
Y lo que la historia dirá de la etapa de Nino Mirón como presidente del Pontevedra CF es que fue una década en la que nuestro equipo se reveló como uno de los mejores de su categoría, que se consiguió un ascenso a Segunda y que el resto de las temporadas estuvimos luchando entre los grandes.
Muchos creen que Fran Crujeiras ya es historia. Se equivocan. Crujeiras no es historia. No ocupará ni una línea en la Historia del Pontevedra CF. No tendrá ni una mención, como tampoco la tendrá aquel Teruelo que no supo perder, todo él incompetencia, eso sí, muy bien planchada. Nos cuesta acordarnos de él. No es nada, y lo mismo le sucederá a este Crujeiras. Nadie se acordará de ellos, ni nuestros nietos conocerán sus nombres. Hay algo de justicia en todo ello.
Los errores de Nino Mirón, como Teruelo, como Crujeiras, se irán diluyendo con el tiempo porque en un contexto histórico carecen de relevancia. Los errores se recuerdan cuando constituyen en sí mismos un hecho de graves consecuencias. Si los de Nino nos hubieran llevado a la desaparición serían recordados en un futuro, pero no va a ser ese el caso. Nadie recuerda ya las otras (muchas) veces en que el Pontevedra CF estuvo al borde de la extinción. Si echamos la vista atrás, lo que recordamos hoy son los éxitos y los fracasos deportivos: nuestros ascensos, la etapa de Hai que Roelo, como nuestra posterior caída al abismo. Nino Mirón tuvo muchos éxitos y muy pocos fracasos. Eso es lo que quedará, y ello no dependerá en absoluto de lo que algunos opinan hoy desde la exaltación, el odio, el rencor o la resistencia a desaparecer de las portadas.
Nino sí es Historia del Pontevedra CF, y el tiempo lo demostrará. Se lo ha ganado. Lo demás es humo, y el humo se va con el viento.
Bajo estas líneas, el mejor momento que nos ha dado el Pontevedra CF bajo la presidencia de Nino. Eso, señoras y señores, eso es Historia.
Teruelo? quien es ese? No se de que me suena...
ResponderEliminarA Crujeiras ya lo estoy olvidando
Pues yo si se quien Teruelo. Como con bastante frecuencia en la casa de un amigo. Piscina, barbacoa, terreno aceptable..... un buen chalet. Y se lo compro gracias a teruelo: era el propietario de la tienda de estetica donde este hombre, de infausto recuerdo para el resto de pontevedreses, compraba por palets su gomina. Este amigo mio, obviamente, le esta muy agradecido, a pesar de su insoportable altivez.
ResponderEliminarDesde luego ese ascenso sí pasará a la historia, como el de León o el de Eibar, aunque me da que habrá que esperar hasta que podamos volver a intentarlo.
ResponderEliminarSaludos Glub
Xa estou de volta. Coma eu non son de reis maghos, fun de vacasións co apalpador para mirar coma trabalha. Foron días ghososos de apalpamentos. Nin o Noel,nin Santa, nin ghaitas.
ResponderEliminarVexo que alghún botoume de menos. É de aghradeser.
Apertas.
Qué cabesinha tenho! Glub, ghustóume o que escribeches, aínda que o tema do fúbol nin me vai nin me ven, sinseramente.
ResponderEliminarÓ sésar o que é do sésar.
A min tamén me ghustaría que alghén me dixera cousas aghradables cando eu sexa aínda mais velha. Voulhe dar voltas, tenho que dar un gholpe de efecto para ter un oco na historia, aínda que sexa pequeno.
Parece que las cosas se van arreglando. A Nino le deseo lo mejor, así como al nuevo presidente.
ResponderEliminarA pesar de gente como Teruelo o Crujeiras, a Nino le debemos toda la grandeza de los últimos años. Un abrazo a Nino y a su familia. Él ha sido el mejor presidente de los últimos 40 años
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