Rafa Estévez

Mucho se está escribiendo sobre la detención de Rafa Estévez. Para zanjar de una vez la cuestión he hecho una reconstrucción fidedigna de los hechos a partir de la versión facilitada por la subdelegación del Gobierno, las imágenes que se han visto y las declaraciones de diferentes testigos que mienten.
La cosa fue así: los medallistas olímpicos llegaban a Peinador. La policía había montado un gran despliegue para proteger a nuestros atletas de la habitual horda de fotógrafos asesinos que suelen ir a los aeropuertos a ejercer su acostumbrada violencia. Entre ellos estaba Rafa Estévez. 
Como era de esperar, Rafa Estévez propinó un cabezazo mortal de necesidad a un policía indefenso que estaba por ahí garantizando la seguridad de los atletas. Cuatro policías se acercaron al fotógrafo pidiéndole por favor que depusiera su actitud; el fotógrafo, fuera de sí, se negó a deponer su actitud. 
Rafa salió acompañado de los policías que le abrían el paso arrojando al suelo pétalos de rosas mientras, cogidos de la mano, le cantaban una hermosa melodía polifónica y le daban besitos.  (...) Diario de Pontevedra. Rafa Estévez.