martes, 20 de noviembre de 2012

5 comentarios:

  1. Saúdo o teu regresso a estas deliciosas crónicas de Pontevedra.
    Grande abraço,
    António

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  2. Caro António:

    Sabes que esos comentarios los agradezco especialmente cuando vienen de alguien como tú, que sabe de estas cosas más que nadie.

    Grande abraço.

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  3. El Alto Mando guarecido en la madriguera de los perjuros le informa que la orange plank road hacia el hada verde está despejada.
    Repito.Despejada.

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  4. Recibido. Pasaremos por ahí para dar buena cuenta.

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  5. Totalmente de acuerdo en lo de que no era Almiranta.El término Almirante no tiene nada que ver con lo que actualmente conocemos. A esta mujer, que su mérito tiene, se le atribuyó ese título de una forma coloquial. Sabido es que desde que se instituyó esta figura del almirantazgo hubo, incluso, almirantes que no habían visto un barco en su vida como es el caso de los Enriquez, figuras palaciegas y que se transmitían el título por simple herencia. Alexandra Lapierre noveló su historia en un libro "Serás Reina del Mundo" en donde juega con esta figura histórica que desde luego le echó valor y coraje al momento que le tocó vivir. Además justo es añadir que esta señora de náutica sabía lo básico, la dirección de los navíos estaba bajo las órdenes de sus pilotos, otra cosa fue la dirección de la "empresa", ahí le tuvo que echar muchos bemoles.

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