Dos frases me vienen así de golpe a la cabeza leyendo las noticias sobre el corralito chipriota. Una se la escuché hace muchos años a una señora: "Si levantáramos de pronto las persianas de todas las casas, veríamos cosas increíbles", decía.
Y es verdad. Ni nos imaginamos qué pasa realmente en cada casa, ni en la de nuestros vecinos. Ellos sabrán. Para nosotros, lo que sucede dentro de la vivienda ajena es un secreto hasta que se declara un incendio o sacan un cadáver apuñalado del edificio de enfrente. Mientras tanto, sólo son esos señores tan amables que saludan siempre cuando nos los cruzamos de vuelta de la panadería. (...) Sigue leyendo en Pontevedra Viva. Chipre.
"Está morrendo xente que nunca morrera".
ResponderEliminarMe encanta esa expresión, dicho o lo que sea. Es como para terminar una conversación densa que no va a ningures y que alguien añada, "pues sí", pensativo.
El sueño de Polífilo y los Porcos Bravos, por Rodrigo Cota¿?
ResponderEliminarEse Rodrigo Cota ¿eres tú?
Me temo que si, señor Fresán y le están dando fino. Creo que Cota no sabe donde se metió
ResponderEliminarQuerida Tareixa, claro que sé dónde me metí. Yo he ido ahí a suicidarme, más que nada porque ya que de todas todas lo van a poner a parir a uno, lo correcto es dar motivos. Así que la cosa va bastante bien, tal como esperábamos quien me invitó y yo.
ResponderEliminarEl mainone lo cazaron ayer en Barrantes.
ResponderEliminarSe olvidó que aquello tan básico de " recuerda César, eres mortal"