miércoles, 6 de abril de 2011

Me muero



Hoy dicen en la prensa que me muero. No dicen "Rodrigo se muere", con esas palabras, pero anuncian  mi desenlace, que será terrible, y dan todo lujo de detalles. Dicen que los que tenemos barriga cervecera nos vamos todos al carallo. Ahora eso se llama "obesidad abdominal".

El proceso será el siguiente: experimentaré primero constantes cambios de humor, en los que se alternarán depresiones con ataques de ansiedad, siempre bajo un estrés insufrible; luego me haré diabético, envejeceré prematuramente, tendré Parkinson y finalmente me fulminará un infarto. Esa sucesión de acontecimientos se acelera dramáticamente cuando el obeso abdominal consume alcohol, tabaco y café. Probablemente lo mío es cuestión de minutos.

Eso nos ocurrirá a todos los obesos abdominales. A Aznar no, por ejemplo. Cuando Aznar dejó la presidencia, decidió convertirse en el joven que había querido ser, pero no había podido porque se estaba preparando para ejercer la profesión más antigua del mundo: recaudador de impuestos. En el Antiguo Testamento salen más inspectores de Hacienda que putas. Y resulta que el joven en el que Aznar se transformó resultó ser un chulo piscinas hormonado y atlético, broncíneo y con media melena. Eso le salvará la vida. Su abdomen es el mejor de entre todos los ex políticos que hablan idiomas porque lleva años trabajando en ello.

Yo solamente pido que cuando el Parkinson me impida recordar mi nombre, alguien me regale una pandereta.

11 comentarios:

  1. Bueno, piensa que no serás el único, la obesidad abdominal se nos llevará a unos cuantos por delante!!! (de momento solo me falta el Parkinson y la Diabetes...)
    ¿Pero sabes que? ¡Que nos quiten lo bailao!

    PD: Es un gustazo leer tu blog!!

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  2. Nada, non faghas caso. E sighe levando o teu bandulho de canhas. Aghora xa non se levan os homes con abdominais, a non ser que queira ser mister Ghalisia. En ese caso si é un punto ó seu favor.

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  3. JDelgado, lo tuyo es hipocondría.La última vez que te vi te estabas muriendo de un esguince y o mucho has engordado desde entonces, que estabas cañón, o te espera una larga vida, que aquí el que se muere soy yo. Por cierto, cuéntale a Gustavo lo mío y dile que quiero leer su novela antes de que llegue mi fin.

    Un gran abrazo a los dos.

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  4. Femia, gracias pola túa solidadierade. A pesares do meu bandillo non renuncio a ser algún dia Mister Galicia.

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  5. Que levante la mano quien ese iría a tomar una caña con Aznar...
    Vale.
    Ahora que levante la mano quien se iría a tomar una caña con Rodrigo Cota...
    Vale.
    Pues ahí lo tienes.
    (Ah, y Aznar la va a espichar antes que tú, porque a él lo va a partir un rayo (vallecano o no. Por díós qué grima que da. Y cuando se le caiga todo eso...Puajk!! Como al Sachueneiguer ése, que es igual de asqueroso)

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  6. Ni caso, estaríamos todos muertos. Buena canción esa de Florinda

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  7. mis abdominales son como las de aznar, espero que vivas muchos mas años que el pero menos que yo ;-)

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  8. De la pandereta me encargo yo, no te preocupes por eso. Es lo mínimo que puedo hacer después de los buenos momentos que me haces pasar en tu blog.

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  9. Estou con Gata Chopada, antes unha caña contigo que con Aznar, que como decía a canción de Sinietro Total, moito músculo e pouco cerebro.

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  10. Tú no te nos mueras, Glub, que ya no sabríamos que hacer sin ti, así que aguanta, ya sabes.

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  11. Definitivamente, y una vez revisado mi abdomen de nuevo, tengo mejores abdominales que Aznar, independientemente de que nunca haga ejercicio, las conseguí con unas cicatrices verticales y horizontales así que son para siempre.
    Seguramente Glub tambien tengo mas obesidad abdominal que tú.
    Ya me quedan pocas vidas¡¡¡

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