El Pulpo Paul y la existencia de Dios.

El Pulpo Paul ha pronosticado la vivtoria de España frente a Holanda en el Mundial de Sudáfrica. Al parecer, Paul tiene una estadística de aciertos cercana al 100%. Desconocemos (al menos yo lo desconozco) si otros pulpos tienen esa misma habilidad. Puede que sí, que todos los pulpos sepan pronosticar el futuro de igual manera, pero que nadie haya hecho la prueba. En mi tierra nos los comemos sin preguntarles el resultado de un partido de fútbol, y eso es injusto. Parecería más lógico comernos a Rappel o a la Bruja Lola, que cobran por pronósticos fallidos.

Con todo y lo importante que es conocer de antemano que seremos campeones del Mundial, las virtudes de Paul están severamente infrautilizadas. Más nos valdría preguntarle cuándo será el Juicio Final o si existe Dios. Muchos estaréis ahora pensando: "Pero Paul solamente puede hacer predicciones". Así es, listo, pero podríamos preguntarle: "¿existirá Dios mañana?" Bastaría con ponerle dos cajas con sendos mejillones dentro. En una caja ponemos un cartel que diga "Si" y en la otra uno en que se lea "No". En lugar de eso, tenemos un pulpo que conoce el futuro y le hacemos hablar de fútbol. Luego nos ponemos a escribir tratados en los que discutimos si Dios sí o Dios no. El pulpo debe estar pensando que somos imbéciles. "En lugar de preguntarme si el Yondelis curará el cáncer me preguntan por el España-Holanda".

Curioso es que el personaje más popular de un Mundial sea un pulpo. Ni Cristiano, ni Messi, ni Puyol ni Villa. El Pulpo Paul, que sabe más de fútbol sin haber visto un partido que todos los futbolistas, entrenadores y aficionados del mundo entero.

En fin, saquemos a pasear las vuvuzelas, las banderas y el ron. Somos campeones del mundo. Nos quedamos con el pulpo más famoso antes de Paul, interpretado por The Beatles, con voz de Ringo Starr. Leyendo los subtítulos despejaremos cualquier duda sobre la relación del grupo con las drogas.